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Por Marisa González
Con los alumnos y alumnas de 2° año A y D de Primaria trabajamos en un proyecto sobre la producción artesanal y la producción industrial.
A través de textos informativos, videos y experiencias directas, los estudiantes investigaron, analizaron y compararon ambos
procesos de producción. Y es allí donde nos centramos en el trabajo artesanal, conociendo la diversidad de artesanos que viven del trabajo que realizan con sus propias manos. En el marco del proyecto nos reunimos con artistas, en esta ocasión con un excelente artista plástico, que además es el padre de un alumno de 2° D.
Eduardo Basualdo es un artista plástico que presenta una muestra a través de un recorrido con forma de laberinto en el cual él mismo va guiando a los estudiantes a descubrir introspectivamente pensamientos, imágenes, reproducciones mentales a través de la pupila. Con los ojos cerrados y por medio de su voz, nos invitó a disfrutar la experiencia y plasmar emociones, a realizar inferencias, relacionar entre sí cada uno de los detalles observados para ir más allá y descubrir que lo que cada uno pueda sentir e imaginar está bien y que no hay que cumplir con ningún parámetro de autenticidad o veracidad.
Más allá de su generosidad, elocuencia, fluidez, paciencia y empatía, serenidad y confianza con cada uno de los chicos, el encuentro con Eduardo nos brindó una forma de trato y de trabajo en donde su voz, sus posturas y su manera de conversar guiaron a los estudiantes a vivir esta experiencia del modo que él pensó, planificó, diagramó y llevó adelante. La visita tuvo un carácter muy ameno, muy representativo, visual y tangible en el que utilizamos todos los sentidos.
Realmente una experiencia maravillosa y única acompañada de su creador.
Agradezco a las docentes que participaron y colaboraron con la visita: Mariana, Geraldine, Rosana y Gisela. Y además a la gentileza de Eduardo Basualdo por acompañarnos a disfrutar de su obra titulada: “Pupila”.
